Enzo Francescoli, en su carácter de amigo de Marcelo Gallardo, reconoció que se “alegra de que Barcelona lo esté observando por la importancia de ese club”, pero como director deportivo de River aclaró que “no hay nada respecto de una posible contratación”.
“Sé lo que leen todos y me alegra por la envergadura del club que lo está mirando, pero no hay nada cierto. Todos los años Gallardo hace una evaluación en diciembre y después toma la decisión de seguir, pero eso es muy personal de él y su grupo de trabajo. Por eso hay que dejar que las cosas sucedan”, expresó el uruguayo en declaraciones a TyC Sports.
“Igual hay que estar preparado para afrontar la decisión que vaya a tomar. Pasó cuando hace unos años Ramón (Díaz) nos dijo que se tenía que ir. Pero no pienso mucho en eso, sino que me hacen pensar mucho más los periodistas cuando me preguntan. No estoy pensando en lo que va a pasar en un par de meses, porque ni siquiera es mi decisión”, advirtió el director deportivo del actual campeón de la Copa Libertadores.
Ante la potencial salida del “Muñeco” y la posible búsqueda de un reemplazante, Francescoli señaló: “No necesariamente el próximo técnico debe ser alguien identificado con la institución. No creo que sea una condición. Siempre es más importante conocer el lugar, eso lo hace más fácil, pero no quiere decir que sea solo alguien del riñón de River. Llegado el momento, veremos. Trataré de hacerlo con calma y pensando en el club. Ojalá salga tan bien como salió ahora”.
Respecto del cambio de sede para la final de la Copa Libertadores con Flamengo, que pasó de Santiago de Chile a Lima, Francescoli reconoció: “Era algo casi inevitable y no se podía esperar más. La situación en Chile tiene altos y bajos. Se ha tomado la decisión correcta, porque se analizaron las diferentes posibilidades y resultó que Lima era la más la lógica teniendo en cuenta la capacidad del estadio y la seguridad. Esperemos que el campo de juego también esté bien. Lo ideal hubiera sido Asunción o Montevideo, pero el calor que hace en Paraguay Iba a en contra del espectáculo. El Monumental de Lima es cómodo, pero el único problema es el acceso. Un poco más de viaje, de incertidumbre, pero está bueno que también se haya tomado una decisión”.
Fuente: La Nación