Un niño caucetero de 7 añitos fue duramente reprendido por su madre, luego de sacarle un celular y 20 pesos a un hermano.
Después de faltar varios días, el niño regresó al segundo grado de la escuela Obispo Zapata y la maestra notó que tenía la piel de sus manos “lastimadas” y explicó que fue por un problema en su casa.
La directora, la maestra y el niño inmediatamente llegaron a la Seccional Novena de Caucete para hacer la denuncia.
Hasta la comisaría llegó la madre, quien habría admitido ante el personal docente que ella reprendió al pequeño por sacarle 20 pesos y un celular a un hermano. El castigo fue hacerlo poner las manitos arriba de las hornallas de la cocina.
El niño quedó bajo el cuidado de un familiar hasta que avance la investigación.