Tras la sanción y reglamentación de la ley conocida como «moratoria previsional», la pelota quedó del lado de la Anses: es el organismo público quien establecerá los parámetros para circunscribir el acceso al plan de pagos para la jubilación sin aportes suficientes.
En otros términos, del universo conformado por quienes no realizaron los suficientes aportes para poder jubilarse, Anses deberá definir quiénes finalmente accederán al régimen y percibirán haberes mensuales en lo inmediato.
La tarea de la Anses es relevante desde lo económico, pues dependiendo de cuán restrictivos sean los parámetros que establezca resultará menor o mayor el costo fiscal del régimen. Es que la moratoria previsional fue uno de las cuestiones más controvertidas en la última revisión que llevó adelante el Fondo Monetario Internacional (FMI), al considerarla «imprevista».
En el marco de una caída importante en la recaudación por derechos de exportación, debido a la sequía, es importante para el cumplimiento de la meta fiscal la disciplina en el gasto público. Por ello, el FMI dio luz verde al régimen pero señaló en un reciente reporte que «el costo fiscal de la nueva moratoria de pensiones debe mitigarse a través de regulaciones estrictas para apuntar la entrada solo a aquellos con mayor necesidad«, y por ello se acordó enfocar la moratoria «a los sectores de población adulta mayor que más requieran de esa herramienta excepcional«.
A Anses le toca afinar el lapiz y definir el subconjunto de personas para que accedan. Para ello tomará en cuenta tanto la cantidad de meses necesarios como los aspectos patrimoniales y socioeconómicos del solicitante, y para ello tomará sus bases de datos con las suministradas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y otros organismos.
En los períodos declarados se solicitará que se haya residido en el país y que no se haya trabajado de manera formal.
Pero se conocen requisitos adicionales para que quienes tienen o cumplan la edad jubilatoria (60 años las mujeres y 65 años los varones) accedan al plan. En los períodos declarados se solicitará que se haya residido en el país y que no se haya trabajado de manera formal, ni en relación de dependencia ni de manera autónoma. En otras palabras, no debe haber aportes ya registrados por los meses en cuestión.
Se espera que la Anses termine de definir los parámetros para conocer finalmente quiénes podrán acceder y quiénes no.