Momentos de especial emoción vivieron hace unos días internas del Pabellón de Mujeres del Instituto Penal de Chimbas al celebrar el Día de la Madre, evento organizado por la Pastoral Carcelaria Católica y el Centro Genesaret, lugar de contención y ayuda para personas que recuperaron su libertad.
La alegría por el canto que se comparte sumado a golosinas y regalos, resultado de diversas donaciones, hicieron que al menos por unas horas, las mamás acompañadas de algunos de sus hijos, pudieran elevar una mirada y entregar una sonrisa.
Al clima de fiesta se sumaron varios integrantes de la Pastoral Carcelaria Católica, quienes acompañados por el padre Eduardo Gutiérrez Bonduel, cumplen actividades todas las semanas de escucha y acompañamiento, compartiendo su Fe en diferentes pabellones de esa Unidad Penal.
La presencia de la Iglesia Católica en el Penal es de consuelo y esperanza para mujeres y hombres que cumplen su condena, simples servidores que en su corazón dicen si al llamado de Dios de llevar su Palabra a todos, con la esperanza de recibir el premio que promete en Mateo 25 “Vengan benditos de mi Padre porque estuve preso y me visitaste”.