Una trabajadora social clínica y terapeuta estadounidense utiliza barbijos con penes para que cuando la gente le diga algo al respecto, ella pueda darse cuenta que “están demasiado cerca” y pedirles que se alejen.
Se trata de Mindy Vincent, quien confesó que originalmente compró las máscaras para que ella y sus compañeros las usaran de forma preventiva. La mujer contó que le pareció una manera divertida de protegerse en su trabajo, el cual está ubicado en la Coalición de Reducción de Daños de Utah.
Sin embargo, la terapeuta le terminó dando otro uso a ese material sanitario con el objetivo de respetar las recomendaciones de los especialistas de la salud, informó El Sol de Mendoza.
“Cuando alguien me dice que mi máscara tiene penes, les hago saber que así es como determino que están demasiado cerca”, sostuvo Vincent. Y de esta manera, la persona “amablemente retrocede”, agregó.
Con una gran cantidad de material a su disposición, Vincent decidió comenzar a vender las máscaras y destinar toda la ganancia a la organización sin fines de lucro que ayuda a las poblaciones vulnerables afectadas por el abuso de sustancias. Allí, Vincent tiene el rol de directora ejecutiva.