Un grupo de científicos de la NASA aseguró tener evidencias para confirmar que existe un universo paralelo y que se encuentra justo al lado del nuestro.
Los investigadores manifestaron que en el universo paralelo, todas las leyes de la física podrían ser completamente opuestas a las que conocemos. Es decir, un mundo en donde el tiempo va hacia atrás.
El hallazgo se produjo cuando científicos de la agencia espacial de Estados Unidos investigaban desechos congelados en la Antártida, y para ello utilizaron la Antena Antártica de Impulso Transitivo (ANITA). El objetivo principal era detectar el origen de las ráfagas rápidas de radio (FRB), fenómeno que quedó directamente vinculado con el posible universo paralelo.
La idea de ir a la Antártida a fin de establecer el origen de estas señales se debe a las condiciones climáticas. En el lugar hay aire frío y seco, que es verdaderamente útil para evitar las distorsiones de ruido o de radio.
Las FRB emiten una energía un millón de veces más poderosa que cualquier cosa que conozcamos en nuestro planeta. El tiempo de captación se reduce a 0.15 milisegundos, por lo que se necesita un ambiente despejado para poder determinar todos sus componentes.
Entre las características que obtuvo ANITA, en su más reciente incursión, se registró algo llamado “neutrino tau”. Se trata de una partícula que viaja a una velocidad cercana a la de la luz y tiene un poco más de peso que sus acompañantes.
La presencia de este neutrino fue lo que hizo creer a los científicos que esta partícula que acompaña las FRB está viajando a través del tiempo.