La pasión debe haber nublado el entendimiento de Gabriel Feris Fuentes (37), un efectivo de la comisaría 29 de Gutiérrez, ya que este martes lo detuvieron por romper la cuarentena aunque tenía parte de enfermo. ¿La razón? Estaba refocilándose con su novia adentro de un Chevrolet Corsa estacionado en la vía pública.
Ocurrió en Castro Barros y Roca, Maipú, Mendoza, durante las primeras horas del día. Cuando la patrulla que controlaba el barrio se aproximó a la ventana del Corsa, los uniformados entrevieron a dos personas desnudas en medio de ese estrecho universo de suspiros y vidrios empañados: eran Feris Fuentes y su pareja. Según informaron, el individuo intentó “chapear” diciendo que él también era policía, cosa que al faltarle hasta los calzoncillos era difícil de probar.
Es más: cuando se supo que sí era miembro de la Fuerza, la perspectiva se le puso más difícil, ya que estaba con parte de enfermo tras un accidente laboral, por lo que -según su ART- debería haber permanecido en reposo. Así, la colección de causas que enfrenta el policía empieza con la violación de la cuarentena, sigue con una contravención -por tener sexo en la calle- y termina en la posible sanción disciplinaria por no cumplir con los requerimientos de la aseguradora de riesgos.
Es de esperar que Feris recupere su libertad próximamente. Le quedará, eso sí, la mácula de las imputaciones y el pase provisorio a pasiva, lo que significa que cobrará la mitad de su sueldo y permanecerá suspendido hasta que se decida qué sanción le corresponde por su comportamiento como miembro de la institución policial. La causa penal irá por otro camino, y posiblemente se lo juzgue en las próximas semanas.
MDZ