Ayer indignó a miles de salteños el caso de una mujer que quiso comprar una pizza con la tarjeta AlimentAR (destinada a compras de alimentos básicos), en un local de delivery. En las últimas horas se conoció otro episodio similar, aunque para muchos más grave. Una joven quiso comprar un teléfono con el bono de $10 mil.
La historia se dio a conocer luego de que el vendedor de celulares compartiera capturas del chat que mantuvo con la muchacha. Al parecer estaba interesada en adquirir un smartphone a un costo de 11 mil pesos. Según informó Que Pasa Salta.
En la charla, la implicada admite que cobrará el Ingreso Familiar de Emergencia y que pensaba destinarlo a la compra del terminal. Incluso ofrece señarlo.