El hombre que perdió la vida este jueves en la conocida “Curva de los Tontos,” en Rivadavia, fue identificado como Alberto Lino Díaz, de 58 años, quien padecía diabetes y era insulinodependiente, según informaron fuentes judiciales. El incidente ocurrió alrededor de las 18 horas, cuando Díaz, al volante de su Renault 12, sufrió una descompensación mientras se dirigía al Hospital Marcial Quiroga. A pesar de los esfuerzos de reanimación, el hombre falleció en plena avenida Libertador y Pellegrini.
El médico legista que examinó el cuerpo de Díaz informó que presentaba un golpe en la ceja, aparentemente producto de una caída, sin encontrar otras lesiones externas visibles. Sin embargo, para determinar la causa exacta de la muerte, el cuerpo fue trasladado a la Morgue Judicial, donde se le realizará una autopsia.
Las primeras versiones indicaron que, antes de las 17 horas, Díaz se encontraba en su domicilio en el Lote Hogar 30, en La Bebida, cuando comenzó a sentirse mal y se descompensó, cayendo al suelo. Ante la emergencia, su familia solicitó una ambulancia, pero al no llegar con rapidez, su hijo decidió trasladarlo en su auto particular hacia el hospital más cercano. Lamentablemente, durante el trayecto, el Renault 12 se quedó sin combustible y se detuvo en la intersección de avenida Libertador y Pellegrini, a escasa distancia del hospital.
Al arribar la ambulancia al lugar, los profesionales de la salud realizaron maniobras de reanimación, pero ya era demasiado tarde. El fallecimiento de Díaz fue constatado en el sitio, lo que derivó en la intervención del personal policial de la Comisaría 34° y la UFI Delitos Especiales, bajo la dirección del fiscal coordinador Francisco Micheltorena y el ayudante fiscal Mariano Carrera.