Santiago del Estero.- Un hombre que atacó a golpes a su pareja porque se negó a tener relaciones con él al regresar de un evento, fue capturado por la Policía y quedó a disposición de la Fiscalía. La joven tuvo que salir corriendo a la calle a pedir ayuda. Hace solo un par de meses había sido excluido del hogar por otra denuncia de violencia de género.
De acuerdo con lo manifestado por fuentes policiales y judiciales, el grave episodio de violencia se registró en una vivienda del barrio Huaico Hondo de esta ciudad.
Según precisaron las fuentes, la damnificada de 30 años se presentó el domingo en horas de la mañana en la comisaría para denunciar el calvario que había vivido horas antes.
Las mismas fuentes señalaron que la mujer relató que reside junto a sus dos hijos y con su pareja, un hombre de 34 años, con el que tiene una relación desde hace más de una década.
Ante los uniformados explicó que el sábado en la noche concurrieron a un evento y regresaron alrededor de las 9 del domingo. Al llegar a la vivienda, comenzaron una acalorada discusión.
La joven precisó que estaban intentando recomponer la relación, después de que ella lo denunciara por otro hecho de violencia de género meses atrás, oportunidad en la que le habían fijado medidas restrictivas y excluido del hogar, pero ella le permitió regresar a la vivienda a visitar a sus hijos.
De a poco, el acusado habría comenzado a quedarse y pese a que siempre intentaba reconciliarse y mantener relaciones sexuales con ella, la mujer se negaba.
Según la damnificada, al regresar del evento, el acusado habría comenzado a tornarse violento, diciéndole que si no estaba con él, no estaría con nadie, amenazándola por negarse a tener sexo con él.
Minutos después, mientras ella se cambiaba para ir a buscar a sus hijos que habían quedado al cuidado de su cuñada, el acusado ingresó a la habitación y la tiró en la cama, se subió sobre ella y comenzó a propinarle golpes de puño en el rostro.
Al intentar defenderse, el acusado la tomó del pelo y la hizo golpear su cabeza contra la pared, para luego continuar con los golpes en distintas partes del cuerpo.
Cuando pudo lograr que la soltara, la joven salió corriendo a la calle a pedir auxilio a transeúntes que llamaron a la Policía y los uniformados acudieron de inmediato.
La fiscal Judith Díaz, interiorizada de los pormenores, solicitó la orden de detención y la jueza de Género hizo lugar, concretándose a las pocas horas.
