Un joven taxista que trabaja en la empresa de su familia de autos de alquiler, sufrió un violento ataque a manos de dos delincuentes que por poco no le cuesta la vida el lunes por la noche, en Caucete. Se trata de Marcelo Giménez, que tiene 23 años y ayer seguía internado en grave estado, con la mandíbula y el cráneo fracturados, informaron fuentes policiales.
“Está muy delicado, está intubado… lo asaltaron pero no estamos en condiciones de hablar ahora”, se limitaron a decir ayer desde el hospital Guillermo Rawson los familiares de la víctima.
Según voceros policiales, todo pasó alrededor de las 22 del lunes. Giménez manejaba un Renault Fluence de la firma familiar “Radio Taxi Caucete” cuando un sujeto demandó el servicio prácticamente en la sede de la empresa, frente al Supermercado Vea de Caucete.
Luego de recorrer unas cuadras, el pasajero le pidió que parara para que ascendiera otro sujeto. Y todos partieron al supuesto destino en las afueras del departamento, pero al llegar a inmediaciones de Enfermera Medina y Rastreador Calívar, cerca del barrio Justo P. Castro IV, el viaje de rutina trocó en un violento asalto a punta de cuchillo.
La versión policial es que el chofer se resistió al asalto y entonces sufrió la peor parte, pues el sujeto con el arma blanca lo atacó a golpes (no descartan que con la punta del cuchillo) y lo dejó al borde de la muerte, con fracturas graves en su cabeza.
Los asaltantes vencieron la resistencia de su joven víctima, pero sólo alcanzaron a robarle un equipo de comunicación. Por eso fue que Marcelo pudo llamar desde su teléfono a un hermano para contarle escuetamente lo que había pasado y decirle dónde estaba.
Tras ser trasladado al hospital departamental, la gravedad de sus lesiones obligaron a llevarlo hasta el hospital Rawson, donde ingresó minutos antes de las 23. Ayer, la Policía buscaba información en eventuales testigos y también en las cámaras de seguridad del centro caucetero para poder dar con los malvivientes.
Fuente: Diario de Cuyo