Una joven de 17 años fue abusada por su hermano de 13, y los padres de ambos armaron un escándalo en la comisaría.
El caso conmociona a toda Salta y se descubrió el jueves pasado, cuando la adolescente llegó llorando desesperada al colegio céntrico al que asiste. Los directivos del establecimiento llamaron a los progenitores para ponerlos al tanto, ya que la adolescente no paraba de llorar y no quería hablar con nadie.
La madre llegó a los pocos minutos y pudo hablar con su hija. En ese momento le expresó que en horas de la madrugada, mientras dormía, su hermano de 13 años se aprovechó de ella y la violó con penetración.
Los llantos fueron cesando gracias a la asistencia de los docentes, y la madre decidió dirigirse primero a la Comisaría N° 2, donde realizó la denuncia, y sobre todo para que la menor pueda ser asistida por profesionales médicos.
Pese a la conmoción nerviosa, la adolescente también expresó que no es la primera vez que ocurre, ya que su hermano otras veces intentó abusarla y la tocaba en la zona de los genitales por largo tiempo. De acuerdo con su relato, la situación le causaba extremo miedo, al punto que quedaba inmovilizada totalmente, y solo podía llorar hasta tratar de olvidar al otro día.
A pesar del difícil momento y daño irreparable que la menor estaba viviendo, en plena comisaría se armó un escándalo en donde sus familiares protagonizaron una pelea a los gritos delante de todos, dando a conocer el caso a toda persona ajena presente.
Los padres de la menor se encuentran divorciados, y la noche en la que ocurrió el hecho, los menores estaban en casa de la madre. El padre tomó conocimiento de la situación por la escuela y se dirigió a la Comisaría, donde llegó con su nueva pareja, que es “abogada”.
La madrastra y supuesta abogada, le preguntó a la menor lo ocurrido, la adolescente volvió a contar lo sucedido y volvió a entrar en crisis nerviosa. Eso pareció no importarles, porque la mujer se dirigió a la oficina donde estaba la madre y el padre por realizar la denuncia y comenzó a gritar a los efectivos policiales, resaltando que ella era “abogada” y que quería que el propio Jefe de la Policía tomara conocimiento sobre el caso.
“Quiero que ya le tomen la denuncia, yo soy la abogada del señor y quiero saber por qué no le toman la denuncia. Acabo de hablar con la chica y sé todo lo que pasó”, manifestó.
Las acusaciones a gritos entre los tres adultos, buscando culpabilidad sobre el cuidado y la educación de los niños, se escuchaban hasta la puerta de ingreso de la dependencia.
Luego de varios minutos, tras la consulta judicial, siguiendo los protocolos para estos casos, desde la Justicia Salteña, el Juzgado de Menores N° 1 ordenó la menor sea examinada por el médico legal, que se realice el secuestro de las prendas de vestir de la víctima, se dé prohibición de acercamiento entre ambos menores, que se haga entrega de la menor a su padre y que el menor se quede con su madre.