La final del Futsal entre Área II y B° Marayes, en Caucete, fue de película; quienes disputaban el partido empezaron a golpearse y debió intervenir la Policía.
“Cerca de las 22 horas del jueves, requirieron la presencia policial en el campeonato de Futsal, porque había una gresca entre dos bandos” relató el jefe de la Seccional Novena, Adolfo Aciar.
“Al llegar el personal policial, una policía fue agredida y tuvieron que solicitar apoyo de más efectivos y patrulleros. Tres mujeres menores de edad que participaban de la batalla campal fueron detenidas, puestas a disposición del Juzgado de Menores, que ordenó que sean revisadas por el médico y en la madrugada quedaron en libertad” aseguró el funcionario.
Luego de la pelea fueron radicadas varias denuncias en la comisaría por las agresiones, particularmente de un equipo a otro.
Según testigos todo empezó cuando el árbitro decidió expulsar a una jugadora, allí empezaron las agresiones y las hinchas ingresaron al campo de juego para tomar lugar en el enfrentamiento, hasta que llegó la policía.