La información mencionaba una encuesta lapidaria para las intenciones de Mauricio Macri de buscar su reelección. El dato era especialmente significativo porque se trataba de un trabajo de Isonomia, una respetada encuestadora, que suele trabajar para el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
LaPolíticaOnline pudo conseguir este jueves la encuesta que toda la política está buscando. En el trabajo, realizado días atrás, se ve a Cristina Kirchner ganando la segunda vuelta por una impresionante diferencia de nueve puntos sobre Mauricio Macri. La ex presidenta saca 45 puntos contra 36 de Macri en un eventual ballotage.
El trabajo es impactante porque hace no mucho mas de un mes esa diferencia era de apenas un punto. Es decir, la intención de voto de Macri se desplomó de manera alarmante. No parece casual que haya sucedido en el mismo momento que la inflación se disparó al 4,7% y acaso sea la explicación del paquete de congelamiento de precios, techo a la cotización del dólar y postergación de aumentos de tarifas que apuró el gobierno, acaso la última bala para tratar de mantener viable la candidatura del presidente a su reelección.
La encuesta revela que aún hay un 17% de indecisos y un 3% que no sabe o no contesta. El problema es que entre los indecisos también crece la tendencia de voto en favor de la ex presidenta. Se trata de un dato letal para los mercados que venían apostando confiados a un triunfo de Macri en la segunda vuelta. Acaso por eso, este jueves el índice de riesgo país del JP Morgan superó el récord de los 850 puntos y en el mercado de futuros del Rofex se asume que el gobierno no podrá sostener el techo de cotización máxima de $51,45 hasta finde año.
Macri aparece en el trabajo con una muy leve mejora de imagen en Abril respecto a Marzo, pero sigue por debajo de Cristina. Su negativa pasa de 87% a a 84% y la positiva sube de 8% a 14%. Mientras que la ex presidenta sube la negativa del 74% al 76% y la positiva cae del 23% al 22%.
Pero lo más interesante es el análisis de esa franja de 20% de la población que aún no decidió su voto, que definirá la elección. Isonomia hace un muy buen trabajo de proyección sobre ese segmento que no logra despejarle el camino a Macri. Cuando pregunta en el universo de los que seguro nunca votarían por Macri, la franja que mantiene esa convicción baja de marzo a abril del 91% al 89% y los que acaso podrían votarlo sube del 5% al 8%.
Mientras que en el caso de Cristina cuando se explora el posible comportamiento futuro de los que nunca la votarían, los que mantienen esa convicción bajan del 88% al 87% y los que acaso podrían votarla suben del 8% al 10%.
Isonomia también hace el ejercicio de analizar hacia donde migrarían los votantes de Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey y Roberto Lavagna en un eventual ballotage de Cristina y Macri. En el caso de Massa es evidente que entre sus votantes hay una mayor proporción de gente cercana a la ex presidenta. De Marzo a Abril crece del 41% al 45% el universo de sus votantes que optarían por la ex presidenta en un ballotage y baja del 29% al 20% los que lo harían por Macri, subiendo los indecisos del 30% al 35%.
El problema serio para el gobierno es que en el caso del votante de Urtubey, una opción presumiblemente más cercana a Macri, el presidente también pierde terreno. Los que optarían por Macri en un ballotage caen del 48% que registraba en Marzo al 43% en Abril y los que elegirían a Cristina del 27% al 22%, creciendo fuerte los indecisos del 25% al 35%.
Mientras que en el caso del votante de Lavagna es el ñunico donde Macri recupera, pero en un porcentaje ínfimo que no compensa las otras pérdidas. Su aceptación entre los votantes del ex ministro pasa de Marzo a Abril del 36% al 38% y las preferencias por Cristina Kirchner caen del 30% al 29%, mientras que los indecisos también caen apenas del 35% al 34%.
Es decir, hasta ahora, no se ve entre los indecisos un corrimiento fuerte hacia Macri que ayude a estimar que en la segunda vuelta logrará acortar los 9 puntos que el mismo trabajo le da de ventaja a la ex presidenta.