El Gobierno de Javier Milei comenzó la semana con la publicación del decreto 959, que confirma la eliminación de los cargos hereditarios en el Estado. La medida había sido anunciada la semana pasada por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger.
En su anuncio, Sturzenegger explicó que la decisión se alinea con el plan del Ejecutivo de continuar reduciendo la planta de personal estatal. Esta comenzará a regir dentro de los próximos 30 días, ya que los organismos estatales deberán adecuar la normativa correspondiente según sea necesario.
“No se admitirá, para acceder a un empleo en el ámbito del Sector Público Nacional, ningún privilegio, ventaja o beneficio sustentado en vínculos hereditarios, cualquiera sea la modalidad de contratación”, señala el artículo 1 del DNU.
El documento aclara que “en caso de que la normativa mencionada en el párrafo precedente exceda las facultades de las autoridades correspondientes, estas deberán adoptar todas las medidas necesarias para adecuar dichos regímenes a lo establecido en el presente decreto”.
Sturzenegger ejemplificó que “en Aduana y AFIP hay una norma que dice que se atenderán los ingresos en forma inmediata de un hijo o cónyuge en caso de fallecimiento de un agente“.
Por otro lado, la Secretaría de Trabajo, dependiente del Ministerio de Trabajo, “no podrá homologar convenciones colectivas de trabajo celebradas por los órganos y entes del Sector Público Nacional, en los términos del artículo 8° de la Ley N.º 24.156 y sus modificatorias, que se opongan” a esta decisión.
De esta manera, el Ejecutivo continúa reduciendo la planta de empleados estatales, ya que el miércoles pasado anunció que intimará a unos 10,000 empleados públicos que están próximos a jubilarse. Estas medidas se suman a los más de 30,000 despidos registrados desde el 10 de diciembre en la administración nacional.