Según la mitología cristiana, fue enorme luz en el cielo la que guió a los Reyes Magos hasta Belén para poder conocer a Jesús.
Del fenómeno astronómico no se sabe su origen, solo se tienen referencias bíblicas.
Este fenómeno podría repetirse gracias al cruce entre Júpiter y Saturno, algo que no se había podido observar tan – relativamente- cerca de la Tierra desde la Edad Media.
“Las alineaciones entre estos dos planetas son bastante raras, ocurren una vez cada 20 años aproximadamente, pero esta conjunción es excepcionalmente rara debido a lo cerca que parecerán estar los planetas entre sí”, señaló Patrick Hartigan, astrónomo de la Universidad Rice, en una entrevista con la revista Forbes.
“Tendría que retroceder hasta justo antes del amanecer del 4 de marzo de 1226, para ver una alineación más cercana entre estos objetos visibles en el cielo nocturno”, añadió el especialista.
Los avistamientos se podrán observar toda una semana después de la puesta de Sol el 21 de diciembre, señaló Clarín en su portal web.
El doctor Hartigan explicó que las mejores condiciones de observación estarán cerca del ecuador, sin embargo el fenómeno podrá ser visto en cualquier parte del mundo, siempre y cuando el clima lo permita.
Se lo asocia a la Estrella de Belén porque el astrónomo Johannes Kepler que vivió en el siglo XVI llegó a la conclusión de que el fenómeno al que la Biblia hace referencia no fue realmente una estrella, sino una de las múltiples conjunciones entre Júpiter y Saturno.
De acuerdo a la revista Muy Interesante, “la conjunción planetaria de Júpiter y Saturno del próximo 21 de diciembre de 2020 mostrará un resplandor en todo el mundo parecido al que según la tradición, guió a los Reyes Magos al lugar de Nacimiento de Jesús”.
Hartigan señaló que para ver estos planetas juntos en lo más alto del cielo otra vez, se tendrá que esperar hasta el 15 de marzo de 2080.