El terremoto de enero dejó las paredes y el techo de su vivienda al punto de derrumbe, y como si fuera poco las lluvias de hace algunas semanas impactó de lleno en la estructura de la casa que alquilaba y las pertenencias de la familia. Pero este panorama negro para la Gabriela Castro se despejó en pocas horas ya que le confirmaron que fue aprobada como beneficiaria de una casa del IPV y se la entregaron el miércoles en un acto que se realizó en Ullúm.
Entregaron un barrio que comenzó a ser adjudicado en enero. En esta oportunidad, recibieron su casa 28 familias del asentamiento “El Chilote” de Ullúm, y demás personas que resultaron ganadoras en el sorteo del IPV.
“Rogaba a Dios que nos tocara porque la casa en donde estábamos estaba muy dañada por el terremoto y las lluvias”, expresó Gabriela. La flamante propietaria es madre de 3 hijos, el mayor de 14, el que le sigue de 12 y el de 8 que tiene una discapacidad, puesto que sufre de ataques de broncoespasmos.
La Ullunera contó que su antiguo hogar tenía las puntas de las paredes todas agrietadas. Además, el techo de su vivienda se estaba por caer, y las intensas lluvias, y el terremoto de enero empeoró el panorama. La Municipalidad le dio dos palos, con los cuales pudo apuntalar el techo hasta este miércoles que recibió las llaves de su nuevo hogar.
“Estoy contenta por la noticia de la entrega de la casa. Había noches en las que no podía dormir pensando en los destrozos que dejó en la casa las lluvias y el terremoto. Me preocupaban muchos mis hijos”, manifestó.