El amor es posiblemente la fuente más intensa de sentimientos agradables y fuertes que nos podemos encontrar en nuestra vida. Amar es experimentar algo como eterno y descubrir que en ocasiones termina pero jamás muere. Es una realidad dinámica, que cambia, se modifica, muta y se transforma con el tiempo.
No podemos negar que somos herederos de una idea romántica del amor, que si bien sigue latente en nuestra cultura, en las que se nos habla de “medias naranjas” y de amores que viven felices para siempre, es más común ver personas movidas por una insaciable voluntad de experiencias nuevas y aspiraciones muchas veces utópicas, donde esa idea de amar hasta la eternidad queda lastrada.
Sin embargo, hay historias que nos recuerdan que es posible amar a la misma persona por años, donde el todo y la nada se coquetean constantemente entre sí.
Ellos son Leroy, de 103 años, y Uvie Evatt, de 101 años, una pareja que ha demostrado tener un amor verdadero, y para toda la vida.
Recientemente celebraron su 80 aniversario de boda. Sí, ocho décadas gozando de un amor inquebrantable donde el amor ha pasado por todas sus etapas.