n hombre que estaba detenido desde hace 17 años, condenado a prisión perpetua por el conmocionante crimen de una jubilada ocurrido en 2001 en Posadas, fue excarcelado por decisión del Superior Tribunal de Misiones, informaron hoy fuentes judiciales.
Se trata de Ricardo Omar «Kolyno» Jara, de 40 años, quien había sido recibido la pena máxima en un juicio en el que también fueron juzgadas y condenadas a prisión perpetua Cecilia Rojas y Cristina Vázquez, las dos mujeres que permanecieron presas 14 y 11 años, respectivamente, y que fueron excarceladas en diciembre pasado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que ordenó revisar integralmente el proceso por considerar que la sentencia había sido arbitraria y no había tenido en cuenta los descargos de las defensas.
Casi ocho meses después de haber sido liberada, Vázquez, de 38 años, fue encontrada muerta en su casa de la ciudad de Posadas en un presunto suicidio, el 26 de agosto pasado, tras haber atravesado un profundo cuadro depresivo luego de años de encierro.
Por su parte, Jara, que desde hacía 17 años estaba detenido en el Penal 1 de Loreto por el crimen de Ersélida Dávalos de Insaurralde, logró hoy su libertad luego de recurrir al máximo tribunal provincial, que ahora le concedió la excarcelación de manera extraordinaria.
Dávalos de Insaurralde, jubilada del Poder Judicial de Misiones, fue asesinada a golpes en la cabeza con un martillo el 27 de julio de 2001, en su vivienda del barrio Palomar, de Posadas.
Su empleada doméstica la encontró muerta al día siguiente en el lavadero y se determinó que de la vivienda le habían robado dinero y joyas, pero no se hallaron testigos para esclarecer el hecho.
Por el crimen, en 2010 el Tribunal Penal 1 condenó a Jara, a Vázquez y a Rojas a la pena de prisión perpetua, por el delito de «homicidio calificado criminis causae«.
El fallo fue confirmado por el Superior Tribunal de Justicia de Misiones, pero fue apelado ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que en 2016 ordenó revisar la sentencia integralmente; como eso no se hizo, el expediente volvió al máximo tribunal, que liberó a los condenados.
Durante años, Rojas y Vázquez sostuvieron que eran inocentes. Fueron defendidas por distintas organizaciones que reúnen a penalistas del país, hasta que en diciembre último fueron excarceladas.