Pasó casi un año y medio de aquel acontecimiento astronómico del que los sanjuaninos fueron testigos. Después de ese 2 de julio de 2019, cuando ocurrió el eclipse solar total, San Juan ofrece, nuevamente, su cielo para ser testigo de este fenómeno. Esta vez, podrá observarse de forma parcial y, desde el Ministerio de Turismo y Cultura, se recomienda tener en cuenta ciertos consejos para disfrutarlo en óptimas condiciones.
Las recomendaciones son las mismas que para el eclipse anterior. Para observarlo, no hay que utilizar métodos caseros para proteger la vista durante la fase de parcialidad, que será durante todo el tiempo que dure el fenómeno en la provincia. Por eso, se aconseja utilizar lentes para eclipse homologados, telescopios con filtro de luz blanca, H-alfa o similar y construcción de cámaras de proyección.
Es interesante el uso de objetos con perforaciones para ver proyectar sombras y haces de luz en el suelo, y así ver la progresión del eclipse tales como placas de cartón, coladores y espumaderas. Por otro lado, debido a la pandemia de COVID-19, no se recomienda la aglomeración de público ni compartir elementos ópticos entre los observadores. Por eso, la mejor manera de emplear telescopios es utilizando cámaras y proyectores para mostrar imagen en pantalla.
En esta oportunidad, en la ciudad de San Juan, más precisamente en el Observatorio Astronómico Félix Aguilar, la cobertura del disco solar será del 69% a una altura sobre el horizonte de 80,04°. De esta manera, el inicio del fenómeno será a las 11:38 hs, con un punto máximo a las 13:04 y finalizará a las 14:34 hs.
Con reserva y cumpliendo los protocolos vigentes, los prestadores locales ofrecen experiencias únicas:
- Estación C.U. Cesco en Barreal, Calingasta, 2648441087.
- Observatorio Félix Aguilar en Chimbas, 2644231467.
- Conociendo nuestro cielo en Aceitera Campo de Olivos, 2646255007.
- Astronómades en Parque La Quebrada de Zonda, 2645434445.
- Campo de estrellas en Albardón, 2644682181.
- Finca el desafío del Inmigrante en San Martín, 2644457609.
Características del eclipse
El 14 de diciembre de 2020 el día se volverá noche poco después de las 13 horas (hora oficial Argentina) en la zona de la Patagonia de Argentina y Chile. En ese momento, la Luna cubrirá por completo el sol por, aproximadamente, dos minutos. En el resto de América del Sur, el eclipse se verá en forma parcial, es decir, la luna cubrirá parte del sol, sin llegar a ocultarlo completamente.
El primer dato que hay que tener en cuenta en cualquier eclipse de sol, es que los instantes de inicio y fin de las distintas fases, así como su duración, dependen del lugar geográfico en que se encuentre el observador, y de su altura sobre el nivel del mar.
Aunque sea trivial, es importante recordar que el fenómeno no será visible si el cielo se encuentra nublado. Aún así, la variación de la iluminación solar que se produce en un eclipse total de sol puede percibirse aún con nubes.
Finalmente, la posibilidad de observar el fenómeno depende también de las circunstancias topográficas locales, como la existencia de montañas que bloqueen parte del horizonte, en caso de que el eclipse ocurra a muy baja altura en el cielo. Afortunadamente, esto no será problema en este eclipse ya que ocurrirá al mediodía en Sudamérica, con lo cual el sol se encontrará alto en el cielo.
Diferencias con el gran eclipse solar sanjuanino 2019 para San Juan
Fundamentalmente, entre el eclipse que sucedió en julio de 2019 y el que se verá este mes hay tres diferencias. El fenómeno astronómico del 14 de diciembre se verá de forma parcial en San Juan y no total. El disco solar será cubierto en un 69% en la mayor parte del territorio provincial.
En segundo lugar, como el eclipse ocurrirá al mediodía, el fenómeno se producirá a gran altura sobre el horizonte, por lo que no será necesario buscar ubicaciones especiales para poder verlo. En cambio, el eclipse del 2019 se produjo muy cerca del horizonte al atardecer. En ese contexto, la primera situación favorece la observación de detalles sobre el disco solar (al haber menor turbulencia atmosférica) mientras que la segunda favorece la fotografía y apreciación del eclipse en conjunto con el entorno natural (cordillera de los Andes).
Por último, la tercera diferencia tiene que ver con que el sol está saliendo de un mínimo de actividad en su campo magnético y esto lleva a que haya mayor probabilidad de ver sobre su disco manchas solares, así como prominencias en el limbo. Durante la parcialidad o en zonas en las que no sea total, se requerirá el uso de filtros especiales para poder apreciarlas.