El IFE 4 está confirmado, según dicen fuentes gubernamentales aunque sería el último. El Ingreso Familiar de Emergencia no está incluido en el Presupuesto 2021 y el Gobierno trabaja a contrareloj en las alternativas para su reemplazo. Desde la consultora Analytica se propone un IFE residual para menos beneficiarios porque el costo social de quitarlo completamente sería muy alto.
El informe de Analytica, consultora de Ricardo Delgado y Rodrigo Álvarez, presentado por Bae Negocios, evalúa el costo social de dejar de pagar el IFE y la posibilidad de un IFE residual para reemplazar el que hoy se otorga a 9 millones de personas.
La consultora advierte que el IFE fue un límite al “desarme completo del gasto social generado durante la pandemia por coronavirus”. Y considera que el Estado debería seguir acompañando a sectores como el comercio, hotelería y gastronomía, la construcción, el servicio doméstico y ciertas ramas industriales.
“El Estado deberá seguir acompañándolos para que la adaptación a la nueva normalidad no continúe destruyendo capacidades productivas y el entramado social”, analizó.
El costo del IFE
Según el informe, el IFE representa un gasto anualizado de $500.000 millones equivalente a un 2% del PBI.
Si se siguiera pagando, tal como hasta ahora en 2021, eso llevaría el déficit primario de 4,2% a 6,2% del PBI.
IFE residual
Teniendo en cuenta esos datos, Analytica plantea que parece “poco probable” que el Gobierno desarme el IFE completamente en 2021.
Y apunta a que el bono de $10.000 de la ANSES es “una suerte de seguro de desempleo” que se otorgó a los más castigados por la pandemia: los desocupados, trabajadores informales y monotributistas de categorías más bajas.
Según el informe, dentro de los trabajadores formales, el IFE se distribuyó entre los que se dedican a la construcción, el comercio, el sector agropecuario y algunos rubros de la industria manufacturera.
Y suma que el Comercio, Hoteles y Restaurantes, Servicio Doméstico, Construcción y algunos sectores de la Industria (textil, transporte, entre otros), fueron los más afectados y seguirán constituyendo sectores vulnerables que necesitarán de la asistencia del Estado.
“En conjunto, perdieron 2,4 millones de empleos registrados e informales en el segundo trimestre, con un costo estimado de ‘ IFE residual’ cercano a $145.000 millones para 2021, un 0,5% del PBI”, puntualiza el informe.
La clave para Analytica estará en reducir el gasto público pero a la vez impulsar la recuperación del empleo, hecho que se daría reduciendo la cantidad de beneficiarios del IFE a esos 2,4 millones de personas que se quedaron sin empleo y fortaleciendo los programas como Potenciar Trabajo o el Plan Joven que tiene en mente la ANSES.
IFE residual: para quiénes
El infome de Analytica apunta claramente a trabajadores formales o informales que se quedaron sin empleo en este último tiempo, a raiz de la crisis por la pandemia, y que afecta fundamentalmente a los de sectores como:
- Comercio
- Hoteles y Restaurantes
- Empleada doméstica
- Construcción
- Industria textil, del transporte, entre otros.
Según los datos serían unos 2 millones y medio de personas lo que reduciría notablemente el número de beneficiarios de un posible IFE para 2021, según informó Diario Uno.