Santiago del Estero.- Duro revés judicial recibió la enfermera detenida en Estación Simbolar, acusada de estafar a afiliados del Pami, ya que la Justicia ordenó que siguiera presa —al menos por dos años— hasta tanto la causa avance.
A través de una audiencia llevaba a cabo ayer en el Centro Judicial Banda, la Dra. María Alejandra Holgado solicitó la prisión preventiva de Elsa Cristina Martínez, quien fue detenida el pasado 8 de junio en Estación Simbolar.
Martínez, según se ventiló en la audiencia, está sindicada de conformar una red delictiva que habría estafado, en principio, a una afiliada del Pami colapsando su cupo de medicamentos, valiéndose de recetas “truchas”.
Según la investigación a cargo de la fiscal Holgado, la causa en contra de Martínez comenzó en mayo cuando un joven —identificado como Franco Gómez Cáceres, del departamento Figueroa— denunció que su madre, Juana Gómez, habría extraviado el DNI y su carné de afiliada del Pami.
De acuerdo con Gómez Cáceres, a través de la aplicación de Whastapp desde el Pami le enviaban ofertas sobre medicamentos, a su madre situación que resultó extraña por lo que acudió a las oficinas de la mencionada prestación.
Empleados de la obra social le informaron a Franco que su madre registraba habituales retiros de medicamentos, en diferentes conceptos, desde varias farmacias ubicadas en La Banda. Días posteriores sobrevino lo peor.
Su madre contrajo un problema de salud y debió ser internada. Cuando su hijo se trasladó a las farmacias para retirar la medicación que le habían recetado, le informaron que no podía recibir medicamento alguno, porque su cupo estaba más que cubierto.
Ante la queja del joven, desde el organismo —a través del sistema informático— descubrieron llamativamente que la afiliada era compradora frecuente de medicamentos, pero con una particularidad: quien retiraba los productos insertaba diferentes firmas en los comprobantes.
Allí Franco realizó la denuncia y la Dra. Holgado ordenó que Delitos Económicos iniciara las averiguaciones. Así fue que a través de las cámaras de seguridad lograron identificar a la mujer que retiraba los remedios en nombre de Juana Gómez.
Para sorpresa de los investigadores, la acusada era Martínez una ex enferma de un sanatorio bandeño, quien utilizando recetas con sellos médicos truchos retiraba remedios en nombre de varios afiliados.
Según relató la fiscal en la audiencia, Martínez sacaba distintos tipos de medicamentos pero llamativamente las pastillas que más solicitaba eran Clonazepan. En menos de un mes habría retirado más de 30 cajas.
Los investigadores sospechan que la enfermera comercializaba tal medicación en su casa donde tenía una despensa. Mientras que hasta el momento no se conoce qué hizo con el resto de los remedios que sacó.
Ante la Justicia de Control y Garantías, la representante del Ministerio Público Fiscal, sostuvo que la investigación es compleja ya que la acusada podría haber contado con ayuda de otras personas para cometer las estafas.
Además, expresó que de las averiguaciones podrían desprenderse otros delitos, entre ellos de carácter federal, como la comercialización de medicamentos del Pami. También podría haber falsificación de títulos médicos y de documentación.
Finalmente, el juez de Control y Garantías —Dr. Carlos Ordóñez Ducca— tras evaluar todas las evidencias que recolectó la Fiscalía, hizo lugar al pedido de la prisión preventiva y ordenó que Martínez continuara tras las rejas por el plazo de ley, hasta tanto la investigación avance y la causa fuera elevada a juicio oral.
Tenía remedios y recetarios con firmas de falsos médicos
El pasado 8 de junio, con orden del Dr. José Luis Torrelio —juez de Control y Garantías— una comitiva de la División Delitos Económicos ingresó a la casa de Martínez y realizó un minucioso allanamiento.
Allí, durante la requisa al inmueble los uniformados encontraron gran cantidad de evidencias que comprometen a la acusada. Según se supo, Martínez tenía en su poder recetarios en blanco con firmas y sellos de médicos —aparentemente inexistentes— gran cantidad de carnés de afiliados del Pami con sus respectivos DNI.
También en su casa hallaron medicamentos para diferentes tipos de patologías y enfermedades crónicas. Los sabuesos sospechan que estos remedios eran entregados por la acusada a otras personas, para ser vendidos.
Por orden de la Fiscalía, expertos en caligrafía analizan la documentación encontrada. Buscan determinar si fue Martínez quien falsificó tales firmas y sellos y si los nombres de los profesionales de la salud que allí aparecen verdaderamente existen.
Fuente: El Liberal