“Tenía la esperanza de mi madre, que quería que me fuera”, dijo el niño que ahora está en Eslovaquia.
Hassan al-Khalaf es un joven de 11 años que atrajo al mundo entero luego de que la policía eslovaca publicara su historia en su página de héroe, el cual lo califican como un “héroe”. El pequeño es uno de los más de 2,5 millones de refugiados que huyeron de Ucrania a Polonia, Eslovaquia, Hungría y Rumania.
En este caso, Hassan escapó a pie y a través de un largo viaje en tren desde Zaporiyia. “Tenía la esperanza de mi madre, que quería que me fuera”, contó en una entrevista. Ella no podía dejar a su abuela sola, lo que hizo que enviase al niño solo a Eslovaquia, donde estudia su hermano mayor.
Al país llegó con una bolsa de plástico, su pasaporte y un número de teléfono escrito en la mano. Una vez que llegó a la capital eslovaca, Bratislava, fue acogido por voluntarios que le dieron comida y bebida, mientras funcionarios fronterizos localizaban a sus familiares.
“Quiero agradecer enormemente a los voluntarios, porque están ayudando a personas que ni siquiera conocen”, expresó el niño, quien tiene la esperanza de volver a ver a su madre. “Creo que habrá un final feliz”, agregó.
Su historia conmocionó al mundo entero. Se trata de una de las más de 176 mil personas que han cruzado la frontera de Eslovaquia. Naciones Unidas ha calificado a esta huida como la crisis de refugiados de más rápido crecimiento en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.