El hallazgo del cuerpo se produjo alrededor de las 8:10 horas en la Finca Sánchez, ubicada en calle Fortín S/N, antes de Rawson, en Albardón. El propietario de la finca fue quien descubrió el cuerpo de García flotando en el reservorio, y afirmó que el fallecido era alcohólico y tenía problemas de salud, especialmente cardíacos, por lo que le había proporcionado alojamiento durante los últimos dos meses.
El equipo de fiscales de la Unidad Fiscal Delitos Especiales se trasladó al lugar y, junto con personal policial, bomberos y criminalística, realizaron las investigaciones correspondientes. La médica legista que examinó el cuerpo determinó que García presentaba lesiones superficiales recientes en el abdomen y la pierna derecha, así como un hematoma en el brazo derecho, todas estas lesiones de alrededor de 10 días de antigüedad. Además, se observó una cicatriz en el pecho de antigua data. No se encontraron signos de asfixia por sumersión en las vías respiratorias del fallecido.
La unidad fiscal continúa con la investigación para esclarecer los detalles del hecho, aunque el informe preliminar de la autopsia descarta la intervención de terceros en la muerte de Héctor Alejandro García, estableciendo que la causa del deceso fue un infarto, una fatalidad que sorprendió a su entorno y que ahora queda confirmada por la ciencia forense.