Quieren que desalojen a una reconocida Escuela de San Juan para quedarse con su terreno

Un grupo de varias decenas de personas se movilizó y cortó la calle para reclamar por el desalojo de la Escuela de Enología para que en ese predio se construya un barrio. 

Los manifestantes respetaron el protocolo de distanciamiento y se dispusieron a lo largo de calle Paula Albarracín de Sarmiento frente a la Casa de Gobierno de San Juan. Todos llevaban coloridos carteles que hablan de su necesidad de vivienda y piden porque se ocupen los terrenos de esta escuela que fuera creada por Domingo Faustino Sarmiento.

Uno de los referentes del grupo aseguró que reconocen que la Escuela de Enología tiene un valor de «patrimonio nacional» pero como patrimonio se puede revocar porque hay una necesidad básica que son las viviendas dignas para el pueblo», aseguró.

El reclamo dominial de los terrenos de la Escuela de Enología es un conflicto de larga data.

En noviembre del año 2001, se había fijado un plazo de ciento veinte días para que la Escuela de Enología escriturara los terrenos que hoy están en pugna, ese periodo de tiempo expiró por la cual buscan revertir esa situación.

Los espacios que están en disputa son los que se asientan sobre calle 25 de Mayo entre Perito Moreno y Matías Zavalla, allí se ubican las aulas al aire libre, tanto el bosque como el vivero, dónde los alumnos realizan diferentes tareas. “Hemos instado a la Defensoría que realice una inspección sobre los títulos de los otros edificios que se ubican en esos terrenos, el caso del Senasa y el Enerc, ambos construidos luego del año 2001, es decir cuando ya la Escuela fue declarado patrimonio provincial”, concluyó la mamá.

La Defensoría del Pueblo, se basó en la Ley 411-F, que en sus artículos 16 a 19 definen a la Escuela de Fruticultura y Enología como Patrimonio Cultural y Natural, Material e Inmaterial de la Provincia de San Juan. Por su parte el Artículo 19, establece: “La determinación definitiva de los inmuebles afectados a la Escuela de Fruticultura y Enología queda sujeta a relevamiento a realizar por los organismos competentes. La totalidad de los inmuebles que por afectación histórica correspondan a la Escuela de Fruticultura y Enología, tendrán como destino las actividades del establecimiento según su naturaleza; incluidos los espacios físicos cuyo uso y goce se encuentren actualmente o en el futuro en beneficio de la Casa de Gobierno, de la Dirección de Recursos Energéticos y del Centro Regional de Educación Tecnológica”

Durante el mes de julio la Fiscalía de Estado inició una serie de audiencias de mediación con dos familias que están viviendo en uno de los terrenos que tiene la Escuela de Fruticultura y Enología sobre calle Paula Albarracín de Sarmiento y Colombia. En esa oportunidad se citó a los involucrados y llegaron a la conclusión de que uno de los dos particulares reconoció que esas lonjas de tierras pertenecen al Estado provincial por lo que se inició el proceso de desalojo. 

En esa mesa de acuerdo asistieron por un lado los García Miranda, quienes insistieron que tienen posesión veinteañal alegando que Cristóbal García, suegro de Agustín Miranda, celebró un contrato con la institución en 1965. Por lo tanto, descartaron la idea de irse del lugar por su propia voluntad. Situación distinta se presentó con la familia Vallejo, quienes recocieron que esas tierras son propiedad del Estado, aunque antes de que los desalojen pidieron una casa para no quedar desamparados.

El 26 de abril de 2019 la Escuela de Fruticultura y Enología cumplió con uno de sus principales anhelos, tener agua potable. Esto se debe a que comenzó a funcionar la bomba que llevará vida a las 27 hectáreas que conforman el predio de la institución. Proveerá de 130.000 litros por hora, lo que posibilitará que los terrenos vuelvan a producir y las plantaciones comiencen nuevamente a florecer.

Fuente: Diario Huarpe

Salir de la versión móvil